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Esta pequeña iglesia lleva desde el siglo XIV siendo el núcleo de la vida en la muy antigua población conocida como La Riba de Santiuste. Aunque el pueblo nunca fue rico, el paso de los siglos y el esfuerzo de los vecinos fueron incorporando al edificio todo aquello de lo que se suponía debía disponer una iglesia, siendo entre los siglos XVII y XVIII cuando adquiere el edificio su fisionomía actual, hasta los bruscos cambios del siglo XX.
La decoración interior de esta iglesia resultó muy mermada de su antiguo esplendor cuando en el año 1936 se realizó una pira en la plaza de pueblo con las tallas del templo. Afortunadamente las tropas estaban de paso solamente y no la pudieron emprender con la armadura de los retablos, que todavía podemos contemplar hoy. En el pueblo algunos casualmente "se ausentaron", llevándose eso sí algunos de los objetos de culto, que repusieron tras pasar el peligro. De un pueblo situado algo mas adelante y separado por unas horas de similar trance, Valdelcubo, el párroco había tomado precauciones, tal como dejó escrito [1] "quedando a sólo mi cuidado todo cuanto tenía la iglesia por esta causa un hermano del que esto escribe hizo un pozo de cemento debajo de la tribuna y frente a la puerta del bautisterio y en él se escondieron hasta que bajaron leales a nosotros."
Vista del interior de la nave desde el
coro, con
retablo mayor al fondo.
Altar de San Fortunato, obispo y
mártir.
Asociado al culto de
este altar se conservan
los estatutos de una
cofradía y
los "gozos del
santo". Sin embargo
no tengo datos sobre la construcción del
retablo ni la del supuesto
relicario que albergaría las reliquias del santo
Como aportación interesante,
mencionar la tesis de José Carlos Canalda,
que sostiene que las dos figuras que flanquean el remate superior del
retablo serían en realidad los santos paleocristianos hispanos Justo y Pastor, aunque
desprovistos de sus atributos más identificadores. Una
descripción completa de su tesis se encuentra en Artículo
de los Santos Niños (enlace externo). De este modo, quizás el templo los tuviese como advocación original, siendo
santos muy queridos por los mozárabes.
Fachada principal iglesia |
Capilla del Santo Cristo, en fachada opuesta |
Planta de la iglesia y disposición de altares |
A Altar de San Fortunato en su emplazamiento original Dimensiones nave central (y ahora, única): 14 m longitud y 6.5 m de anchura |
Planta de la iglesia [2] en 1983, modificado para reflejar los cambios. La iglesia era originalmente de una sola nave, con presbiterio sobreelevado sobre el conjunto, con bóveda de piedra; nave central cubierta con artesonado y espadaña en la base. Sabemos que en el año de 1689 ya se estaba procediendo a un recrecimiento sustancial de la espadaña y nave, sustituyendo el artesonado por bóvedas de yeso. Ya a finales del siglo XX y por ser de construcción deficiente se eliminó una nave lateral (coloreada en la imagen), macizándose los arcos de la nave y quedando reducida a iglesia de una sola nave, con capilla lateral. La zona eliminada había sido soportal, construido en 1643, donde en los Libros de Fábrica consta que se reunía el concejo para debatir sus asuntos y se manda que no coincidan dichas reuniones con los cultos, para evitar los ruidos en el interior del templo. Dicho soportal sería incluso escenario en 1688 de la extracción de un ciudadano que protestaba airadamente contra la gestión del alcalde, lo cual motivó un pleito con la autoridad eclesiástica por violación de sagrado.
Antigua pila bautismal, el testimonio mas antiguo de la iglesia previamente existente | Imagen espadaña de la iglesia donde se aprecia claramente la sobreelevación que sufrió en 1726, cegándose el cuerpo de campanas hasta entonces existente |
En esa misma referencia se nos proporciona, amén de la planta de la iglesia, la noticia de que en el lado de la epístola se conserva un retablo barroco del siglo XVIII, decorado con cortinajes y angelillos, cobijando una escultura de San Fortunato de escayola del s. XX.
Combinando algún dato obtenido por mi con los de un inventario de retablos barrocos provinciales [4] se puede resumir bastante bien el devenir de los retablos principales que ha tenido la iglesia, de los cuales han llegado noticias hasta nosotros.
[1] Libro de cuentas de fábrica de la parroquia de Valdelcubo, año 1945, Archivo Histórico Diocesano de Sigüenza
[2] Inventario artístico de Guadalajara y su Provincia. Tomo II (Navas de Jadraque-Zorita de los Canes) Madrid 1983
[3] La Riba de Santiuste. Obra de la Iglesia. 1726, Sección Civil, Archivo Histórico Diocesano de Sigüenza
[4] Juan Antonio Marco Martínez, El retablo barroco en el antiguo obispado de Guadalajara. Guadalajara 1997, páginas 212-215